Me mordí la lengua
Bien reza la sentencia que al gato lo mata la curiosidad. Pues bien, desafiando a mi intuición -que en tópicos de música, no se caracteriza por ser tan desatinada- fui a "probar" el X8.
Pese a su súper display a colores, y su buen acabado de aluminio, cada minuto que pasaba me iba decepcionando más y más.
Aunque los sonidos de piano son muy buenos, tener sólo 3 efectos es una verdadera verguenza.
Si tienen duda de por qué se titula así este post, quiere decir que no lo han leído este blog en su totalidad. Lector, si ese es tu caso, dale un vistazo a lo que publiqué el miércoles 5 de octubre de 2005.